
La copa menstrual es un recipiente reutilizable que se introduce en la vagina para depositar el flujo menstrual. No absorbe la sangre, más bien se queda contenida en el interior de la copa hasta que se extrae de la vagina y se desecha el líquido.
Ha llegado para revolucionar la menstruación, se acabó eso de ir al baño cada poco a cambiarte o el estar todos los meses comprando toallas higiénicas.
La copa te permite ahorrar y generar menos desechos ya que son reutilizables durante 10 años lo que te permite un gran ahorro en comparación con los tampones ( 1 copa= 600 tampones).
¿Cuál es mi talla?
Nuestras copas menstruales vienen en 2 tallas: la pequeña y la grande. Todo depende de tu edad y el estado de tu suelo pélvico. Por norma general y, aunque puede haber excepciones, se recomienda:
Talla pequeña
Para mujeres de menos de 30 años que no han tenido hijos.
Si tienes 30 años o más pero trabajas tu suelo pélvico con frecuencia (Kegel Rejuve).
Talla grande
Si tienes menos de 30 años y has tenido hijos.
Mayores de 30 años con o sin hijos.
Pero recuerda que cada vagina es diferente, por lo que esta información es orientativa.
¿Cómo me coloco la Copa Menstrual?
Te explicamos paso a paso como colocarla:
1. Esteriliza la copa (te explicamos cómo más abajo)
2. Lava tus manos antes de tocar tu copa
3. Dobla la copa para reducir su tamaño e introdúcela en tu vagina. Una vez dentro, deja de hacer presión con tu dedo para que se abra y haga el «efecto vacío»
4. Si está bien colocada, no deberías ni notarla. Si tienes alguna molestia no dudes en sacártela, limpiarla y ponértela de nuevo hasta que quede en su sitio.

Uso y mantenimiento de la copa
Puedes llevar puesta la copa hasta 12 horas seguidas, no debe utilizarse más de ese tiempo. Para usarla por primera vez, utiliza el vaso esterilizador especializado, llénalo de agua y ponla a hervir en el microondas durante 3-4 minutos. A continuación, reduce su tamaño como hemos explicado en la anteriormente e introdúcela hasta sentirte cómoda.


Haz esto cada vez que vacíes la copa. La última vez que la vacíes al haberse terminado tu periodo, esterilízala de nuevo para asegurarte de que quede libre de cualquier resto y vuelve a guardarla en la bolsita hasta la próxima regla.
Nuestras copas cuentan con certificados FDA y CE y han sido sometidas a diferentes pruebas de calidad. Además están hechas de silicona hipoalergénica, material que la hace más segura y respetuosa con la zona íntima. Aún así el proceso de limpieza es clave para evitar infecciones: la copa necesita un cuidado especial en cuanto a limpieza (sobre todo en el proceso de esterilización) y uso.
Ponerte una copa menstrual es tan sencillo como ponerte un tampón. Al igual que el primer día que te pusiste un tampón no se te hizo fácil, con la copa también te puede pasar lo mismo. ¡Hasta que te acostumbras! Así que no te agobies si al probarlo por primera vez no sale bien.
Nuestras copas menstrual son muy flexibles, por lo que podrás manejarla fácilmente
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